¡No te pierdas ninguna publicación! Suscríbete a The Softtek Blog
Por Vanina Beraldi, Marketing Manager Sudamérica Hispana de Softtek y Leonardo Gambino, Community Manager de la misma compañía.
Trendwatching publicó un nuevo informe con las 10 tendencias de consumo para América del Sur y Central en 2015. El ranking destaca que los consumidores prestarán atención a las marcas como un todo, y mirarán cuidadosamente cómo se comportan las compañías a nivel social.
Los usuarios son cada vez más exigentes con las empresas, por eso las organizaciones deben acercarse a ellos de una manera inteligente y personalizada. Para ello, el uso de herramientas tecnológicas es crucial, ya que existen las soluciones que permiten segmentar a los usuarios, conocer qué sienten, cómo se expresan y cuáles son sus comportamientos, e incluso sus hábitos de consumo.
Por este motivo, las corporaciones que quieran mantenerse a la vanguardia y deleitar al mercado diferenciándose de sus competidores, deberían tener en cuenta las siguientes pautas:
Mientras que en el pasado las personas buscaban a las marcas de manera proactiva, ahora sucede al revés: Ellos quieren contactarse con ellas haciendo un clic. Esto es posible gracias a las aplicaciones móviles que se descargan gratis en los celulares. Por caso, apps como la de los sitios de delivery Pedidos Ya o HelloFood permiten ordenar comida a domicilio desde la comodidad del teléfono, al tiempo que es posible comparar precios y acceder a los comentarios de otros comensales.
En el siglo XX utilizar un producto de determinada marca era sinónimo de tener determinado status, esto se ve con claridad en marcas de automóviles, relojes o whisky. Sin embargo, las personas están dejando de usar productos por su marca a modo de pantalla o vidriera. Actualmente, lo que quieren es cumplir sus propias aspiraciones a través de las marcas. Como ejemplo, el éxito de Facebook, Twitter y las otras redes sociales tiene que ver con el hecho de que son una plataforma que me permite mostrarnos tal como queremos hacerlo. En síntesis, la marca deja de ser un fin para ser un medio.
Las persona valorarán cada vez más a las marcas que son masivas, teniendo en cuenta que sean inclusivas y que se manifiesten con capacidad y ganas de achicar la brecha en las disparidades socieconómicas. Por eso, los consumidores prestan cada día más atención en las acciones de Responsabilidad Social Empresaria (RSE) que implementan las organizaciones, porque consideran que las corporaciones no solo deben ganar dinero, sino que también deben realizar un aporte a la sociedad. Por caso, en Softtek somos expertos en tecnología, y dado que en este sector hay déficit de profesionales, donamos horas-hombre a una ONG Ingenieros Sin Fronteras para que de la mano de nuestro staff los chicos en estado de vulnerabilidad aprendan a programar o a testear software y así puedan insertarse laboralmente, en una industria donde hay muy buenos salarios y pleno empleo.
Hay actualmente un acuerdo entre quienes ofertan y demandan, siendo que en el pasado esta variable se tomaba de una manera más unilateral. Con la proliferación de websites como MercadoLibre y su modalidad de vender un producto bajo el sistema de “subasta”, con el paso del tiempo este sistema ha ido avanzando hacia otros sectores y es cada vez más habitual encontrar este tipo de metodología en otros mercado.
Las marcas se están haciendo más sociales para generar un espacio en el cual promueve la interacción entre las personas. El boom de las maratones, los festivales al aire libre y otras jornadas multitudinarias hacen que las personas afines con estas actividades o con la marca organizadora se nucleen para vivenciar a la marca desde una experiencia distinta comparado con el mero rol de consumidor.
De las típicas tarjetas para sumar puntos que luego se canjean por premios, estamos pasando a una etapa en la cual los consumidores se relacionan con las marcas en una situación similar a la de un juego. Esto se llama gamificación (gamification, en inglés) y consiste en generar acciones divertidas para que los consumidores se vinculen con las marcas desde el lado del juego y el entretenimiento para lograr más afinidad y lealtad. Por ejemplo en Costa Rica la empresa de telefonía Claro regaló minutos de llamadas gratis por cada minuto que el árbitro adicionara a los partidos del principal torneo de futbol de ese país. Al final de la temporada, la telefónica regaló más de 50 millones de minutos extra a sus usuarios para que realicen llamados sin costo.
Los clientes valoran cada vez más cómo se relacionan las marcas con ellos. En este sentido, si bien está claro que una empresa quiere vender, las personas quieren que ser tratadas como tal, y no como meros clientes.
Las personas pierden mucho tiempo viajando en el transporte público, en la cola del supermercado, en los consultorios médicos, etc. Por eso, valoran a aquellas firmas que les permiten agilizar los trámites desde el smartphone, que es el dispositivo que más tiempo está con su propietario. Por este motivo, seguirá creciendo de manera exponencial el uso de celulares para realizar trámites y hasta para hacer las compras mediante el sistema de mobile commerce (m-commerce). Los tiempos han dejado de ser “muertos” para pasar a convertirse en momentos de hiperconectividad en el cual los usuarios estamos frente a la pantalla respondiendo mails, mirando las redes sociales, jugando a los videojuegos e incluso haciendo compras.
Porque ya no existe una vida online y otra offline, sino que ambas son parte del mismo universo, los consumidores son cada día más exigentes con tecnología con la cual interactúan. Por esto, los websites y apps deben ser seguros, garantizar la protección de los datos, fáciles de utilizar y generar productividad. Definitivamente, Ya pasó el periodo de asombro de la tecnología, y ahora queremos aprovecharla al máximo para el beneficio de los usuarios.
Los consumidores “hablamos” con las marcas y queremos sentirnos identificados con ellas más allá del momento del consumo. Por eso durante los próximos meses se intensificará el fenómeno de analizar las causas sociales por las que lucha una compañía, ya sea una enfermedad, la discriminación, la violencia de género u otra. En pocas palabras, las marcas que ayuden a paliar este tipo de causa serán más valoradas que las otras. Definitivamente, las compañías son parte de la sociedad y los consumidores se tienen que sentir identificados con ellas como un todo.
En conclusión, estamos hablando de “experiencias con las marcas”, no de momentos de compra-venta, por eso es crucial que generen una propuesta de valor relevante. Las herramientas tecnológicas para generar esas propuestas de valor, ya están disponibles.