Por Leonardo Gambino, Community Manager de Softtek
El jueves 5 de marzo se realizó la segunda edición del Digital Marketing Conference en Buenos Aires.
El DMC es uno de los eventos de marketing con mayor trascendencia de América Latina.
Esta segunda edición tuvo a 3 oradores como protagonistas. Comenzó con la presentación del caso de éxito San Luis, provincia argentina, por las políticas tecnológicas que implementó.
Continuó Daniel Sieberg, Senior marketing manager de Google. El cierre fue con Randi Zuckerberg, ex Directora de marketing de Facebook y hermana de su fundador, Mark Zuckerberg.
No pretendo aquí hacer una reconstrucción de las disertaciones, sino simplemente destacar los aspectos que me llamaron la atención.
San Luis, un caso de éxito
Este proyecto comenzó en la década del 90. Hasta ese momento, San Luis era un pequeño productor de materias primas con una economía muy poco dinámica.
Dada la situación, el Gobierno de la provincia entendió que se necesitaba un cambio. A partir de ahí, comenzó un proceso de investigación que en primera instancia detectó que la conectividad le permitiría a sus ciudadanos y a sus industrias ser más competitivos en el mercado, ya que un pueblo que viera restringido el acceso a la información estaría en desigualdad de condiciones.
Cuando comenzaron a buscarse casos que sirvieran de referencia para lograr esa conectividad, notaron que Canadá había estado en un contexto similar. El país durante mucho tiempo había sido exportador de materias primas, principalmente madera y pescado. El camino que eligió el país vecino de EE.UU. fue el de la inversión para que sus ciudadanos tuvieran acceso a las tecnologías de la información para generar desarrollo.
En San Luis, tomando como base el caso canadiense, dieron origen a la “Autopista de la Información”, que es la infraestructura tecnológica que provee de internet wi-fi a toda la provincia mediante un tendido de 1.000 kilómetros de fibra óptica dándole conectividad a sus ciudadanos, entre ellos al 100% de las escuelas y hospitales. El objetivo de esta política no fue competir con el sector privado, sino complementarlo y así, motivar a que San Luis se convierta en en productor de conocimiento.
Esta política se complementó con la creación de un Parque Informático, un polo tecnológico creado en 2007 por el Gobierno provincial ubicado en el campus de la Universidad de La Punta. El PI tiene 23 compañías instaladas; entre ellas Unitech, Mercado Libre y Raona; en las que trabajan más de 400 personas.
Daniel Sieberg, Senior marketing manager de Google
El orador que representó a Google comenzó con un testimonio personal. Hace 5 años aproximadamente sufrió una adicción a la tecnología. Luego, editó un libro que se llama “The Digital Diet” que cuenta y/o recomienda cómo hacer para tener un consumo responsable de la tecnología.
Ese fue un tema recurrente mientras habló. “Querer a la tecnología pero no amarla incondicionalmente”. Si bien muchas veces podemos creer que aumentamos la productividad si estamos más conectados, destacó que estar enfocado en los vínculos y las relaciones humanas es clave para mantener el equilibrio, aún en los negocios. Muchas veces uno puede tener reuniones con clientes o socios, y por tener la atención dispersa en un dispositivo puede impedirnos cerrar un acuerdo o una transacción relevante.
Por supuesto, el consumo medido de la tecnología también es un tema muy recurrente en quienes son padres. Al respecto, Sieberg dijo que el mejor antídoto es el autocontrol. Los niños imitan muchas actitudes de sus padres ya que es la única referencia que tienen. Por eso, desarrollar su propia disciplina es la mejor enseñanza que se puede dar.
Siguiendo con la dieta tecnológica y la dispersión, las compañías están sufriendo un problema generalizado. Los empleados no logran descansar bien a la noche por las interrupciones que provocan los smartphones si no se los silencia y por eso, baja considerablemente su rendimiento laboral.
El término ´multitasking´ es ya bien conocido por nosotros. Sin embargo, el ejecutivo de Google mostró una encuesta que refleja que sólo el 2% de las personas potencia su desempeño en la realización de varias tareas en simultáneo. El resto del 98% disminuye su productividad y pierde hasta 2 horas diarias en el afán de realizar sus actividades de forma desestructurada.
La tecnología es un plato muy nutritivo pero no es el único alimento que necesitamos. Mejor hacer dieta.
Randi Zuckerberg, ex Directora de Marketing de Facebook
La hermana del creador de Facebook estructuró su discurso en las tendencias que ella percibe en Silicon Valley.
Hoy, las empresas se convirtieron en empresas de medios. Todas las compañías son (o deben ser) creadoras de contenidos y para comunicar ese contenido, hay a disposición una variedad muy amplia de medios. Desde una aplicación o un blog hasta el packaging de una tienda de alimentos.
Un buen marketer debe salirse del roll puro comunicación-venta y migrar para ser un editor de contenido relevante para los consumidores. Las marcas son contenido.
Otra idea que Daniel Sieberg mencionó pero en la que Randi Zuckerberg hizo especial foco fue la de emprender dentro de las grandes empresas. Actualmente se habla de start ups, espíritu emprendedor, ser tu propio jefe, etc. Sin embargo, las empresas grandes ofrecen proyectos muy motivantes para quienes las integran. Además, es un paso obligado para quienes decidan comenzar un proyecto propio en el futuro.
Para finalizar, hizo una diferenciación entre las buenas y malas prácticas que le podemos dar a tecnología. Entre las buenas, la educación de los niños está sufriendo cambios muy positivos que le permite a las generaciones que vienen tener una formación más horizontal e integral. Entre las malas prácticas, destacó aquellas que alejan a las personas de sus vidas. La tecnología es útil pero no debe impedir que hagamos otras actividades que nos hacen bien y nos mantienen en equilibrio.
Estas fueron las ideas que más llamaron mi atención. Autocontrol en el uso de la tecnología, contenido relevante desde las marcas hacia los consumidores y disminuir la ansiedad en las tareas que realizamos para potenciar nuestra productividad.
Ya lo dijo Daniel Sieberg, "Querer a la tecnología pero no amarla incondicionalente".